Hay cosas que no vamos a poder cambiar, esto suena cruel y despiadado pero es la pura verdad y cuando la entendemos, vamos a poder avanzar, cruzar al otro lado y valorar lo que nos queda. Hay personas que se quedan enganchadas con situaciones que no van a cambiar y siguen girando en ese torbellino que los está llevando a su propia destrucción.

Mis amados Dios siempre tiene un plan que nos da esperanza, pero para ver ese plan tenemos que salir de ese estado de duelo y no seguir en la rutina de tratar de cambiar las cosas, lo que si podemos hacer es comenzar a cambiar nuestra actitud frente a las circunstancias, levantarnos, sacudirnos y seguir en avance y crecimiento.

El profeta Samuel se la pasó lamentando porque Dios había desechado a Saúl (1Samuel 15:35), y Dios tuvo que llamarle la atención y le dijo: en 1 Samuel 16:1. !HASTA CUANDO LLORAS A SAÚL!! Estas palabras son de confrontación. Hasta cuando lloras!! Significa que tenemos la capacidad y autoridad para decir hasta aquí! Que todo tiene su tiempo, que somos los únicos responsables de permanecer o salir del lamento, no es malo llorar o hacer duelo por algo o alguien que ya no está, o que tal vez se perdió o por una ruptura, lo nocivo esta en insistir seguir en ese estado.

La vida sigue y hay cosas nuevas por descubrir, no caigas en la rutina del lamento porque tu mismo estás perdiendo los mejores años de tu vida. Samuel se tuvo que parar de ahí, ya no había nada que hacer con respecto a Saúl, pero ya Dios tenía un plan, había escogido un hombre conforme a su corazón, un David, el segundo rey de Israel. Así mismo Dios ya tiene un plan para ti!! Sus planes nunca fallan, son las personas que son duras de corazón, pero no te quedes esperando a cambiar personas o circunstancias, cambiemos nuestra actitud! Vamos a mirar con fe, seamos agradecidos, arrópate con el manto de esperanza y verás que pronto descubrirás lo nuevo que Dios tiene para ti.

Les enviamos un abrazo 🤗 fuerte 💪 desde la distancia.

Seguimos orando por ustedes, sus países y sus familias.

Les amamos.

Pastores Raymond & Mónica Jaquez.